El Valle de Tena, en la cuenca alta del río Gállego, es uno de los más bellos del Pirineo. La entrada al mismo tiene lugar a la altura del estrecho de Santa Elena, llamado popularmente "zoque" y que no es sino los restos de una antigua morrena glaciar. Esta obra aborda el conocimiento de los apellidos de la zona y las distintas casas del Valle, tras unas notas histórico-geográficas que sitúan al lector en un paraje único e histórico donde un arca de privilegios, símbolo de unión y organización de tres quiñones, albergaba la documentación y los privilegios del Valle. Con su triple cerradura, cada quiñón disponía de una de las tres llaves y sólo podía ser abierto mancomunadamente