Una de las tareas más apasionantes de la teología es situarse en la gran Tradición de la Iglesia y avanzarse a leer la Escritura según el Espíritu con el que fue escrita. Hay que elaborar una hermenéutica del dogma, desplegar los núcleos y las intuiciones de los Concilios y del Magisterio, sumergirse en los armónicos de la -lex orandi- y del entramado sacramental de la Iglesia, comprender el -sensus fidei del pueblo de Dios y su praxis de vida evangélica en el decurso de los años y de los siglos. Todo ello, sin embargo, debe realizarse sin evitar las preguntas y las demandas múltiples que llegan del mundo, donde conviven creyentes y no creyentes, gente de una confesión religiosa y de otra, autóctonos e inmigrantes, integrados y alternativos. Con su teología de la historia, la Dei Verbum contribuye a precisar el lugar de la Palabra que se hace presente en la humanidad y, en último término, a mostrar el rostro de un Dios, que -dispuso en su sabiduría revelarse a Sí mismo-; de este modo- los hombres, por medio de Cristo, Verbo encarnado, tienen acceso al Padre en el Espíritu Santo- (DV 2). Armand Puig i Tàrrech (La Selva del Camp, 1953), presbítero, es Rector del Ateneo Universitario San Paciano y profesor ordinario de Nuevo Testamento en la Facultad de Teología de Cataluña. Doctor en Sagrada Escritura por la Pontificia Comisión Bíblica (1984), ha sido el coordinador de la -Bíblia Catalana. Traducció interconfessional- (BCI, 1993, 2007). Es miembro de la Asociación Bíblica de Cataluña, de la Real Academia de Doctores, y de la -Studiorum Novi Testamenti Societas-, de la que fue presidente (2011-2012). También fue presidente de la Junta de Decanos de Teología de España y Portugal (2009-2011). Autor de decenas de libros y artículos sobre exégesis bíblica, espiritualidad y traducciones bíblicas catalanas medievales.