Los sueños, el amor, las intenciones, es un trabajo que recoge en dos volúmenes la obra poética completa de Carlos Álvarez: el primer volumen comprende los poemarios que escribió de 1964 a 1976, y el segundo volumen abarca su obra poética desde 1977 a 1993. En total más de quince poemarios que recogen la trayectoria poética de Carlos Álvarez. Estamos ante la obra total de un poeta que ofrece pocas aristas; una obra marcada por la coherencia temática y formal, que no es sino consecuencia de la propia coherencia intelectual de su autor: Carlos Álvarez. Una obra cuyo gran valor es conseguir la meta máxima de un poeta: llegar a cada lector con garantía de no ser rechazado. Es la consecuencia de ser la obra caudal de una fuente -Carlos Álvarez- dotado del don para la poesía y, sobre todo, dotado de una sensibilidad paralela a su responsabilidad como ser humano colectivo. En los libros que componen esta obra completa -existen muchas variantes en antologías, reediciones, ediciones en otros países, etc. - se condensan 30 años de escritura poética de Carlos Álvarez. Y en gran parte de los poemas se condensa una vida de gran interés colectivo -el individual queda para el poeta- que puede decirse tiene una carga ejemplarizante de gran interés. Los sueños: ideal de convivencia; el amor: actitud fraternal sin parangón, sin obviar las dotes románticas que se vislumbran en algunos poemas de temática claramente amorosa; y las intenciones: compromiso y lucha por los demás, forman un itinerario que hacen de este poeta uno de los pocos de los que puede decirse que su voz genuina y única es referencia reconocible entre el resto. Estamos, pues, ante una obra poética de gran calado y consideración mítica, especialmente entre los lectores de final de la dictadura franquista y principio del periodo democrático. Estamos ante una obra que no es afectada por el paso del tiempo, pues siempre se dan gran parte de los sucesos que la inspiraron. Otra cosa son los y las poetas con capacidad para construirla. Carlos Álvarez lo hizo y por ello es ya imprescindible legado.