El Dr. Naranjo retrata la patología de nuestra civilización en crisis, visible en todos los ámbitos de la vida y la cultura, y como toda crisis es un momento de "Peligro", incluso de amenaza para la supervivencia en el planeta, y al mismo tiempo es una llamada de atención a aprovechar la oportunidad de unir nuestros esfuerzos para una transformación individual y social.
En él, el autor nos propone un reto ofreciendo soluciones alternativas a la mente patriarcal, tales como trabajar por el desarrollo de la conciencia individual y social a través de la búsqueda de la autorrealización personal mediante el equilibrio de nuestras "tres personas interiores" (Padre, madre, hijo), y los tres tipos de amor que emanan de ellas, y que no son más que la contraparte vivencial de nuestros tres cerebros.