Diego Ramírez de Villaescusa fue una figura señera en la Corte de los Reyes Católicos desde su nombramiento como Capellán Mayor de su hija Juana. Reformador de la universidad de Salamanca y escritor de diálogos renacentistas, entre otras actividades, pasó de ser el presidente de la Chancillería de Valladolid, el más alto tribunal de justicia de la época, a prófugo. Por su labor de mediador en la guerra de los Comuneros tuvo que huir a Roma con el papa Adriano VI para escapar de las represalias del emperador Carlos V. La novela muestra, entrelazados, los acontecimientos de la historia oficial, en los que está documentada la participación de don Diego, y otros imaginados, hechos de los que no hay memoria escrita pero sí huellas o claves interpretativas en los monumentos existentes en Villaescusa y en las obras escritas de este personaje.