Robarle a los ¿pobres? No, espera, cà mo se decà a... Tobu y Brakk no viven grandes aventuras... son recaudadores de impuestos. Tobu se siente muy feliz en su puesto como mago burocrà tico, pero Brakk siempre ha soà ado con hazaà as màs propias de un guerrero. Toda esta rutina se viene abajo cuando les roban la recaudacià n y se convierten en Proks, fugitivos buscados por todo el reino. La que les espera.