La historia de la lingüística descubre en las autobiografías de sus académicos una fuente inédita y reveladora. Es historiografía narrativa o bionarrativa. Se ocupa de la teoría de la narración y de las biografías intelectuales de sus practicantes. A partir de los años ochenta del siglo pasado, los lingüistas han promovido obras colectivas de memorias. En ellas dan información en primera persona sobre su formación, trabajos y vida institucional. En un sentido amplio, los estudios de la escritura del "yo" lanzan la historiografía a una dimensión metodológica que contempla la narración como fuente y género de la propia historia.