Traer el hielo desde los más altos neveros de la montaña, conseguir la leña de las entrañas del monte, pastorear el ganado a cientos de kilómetros del lugar de residencia para encontrar los mejores pastos, obtener carbón vegetal con el costoso y arriesgado proceso de la cocción de la leña, trasladar miles de troncos a través del cauce de los ríos, extraer del mar su riqueza, en definitiva, obtener de la naturaleza sus frutos, fue en el siglo pasado y más atrás, un esfuerzo imprescindible para conseguir el sustento.
En LA NATURALEZA Y SUS OFICIOS encontraréis más de 100 antiguos oficios, algunos de ellos, muy pocos, se siguen manteniendo como motor económico o como residuo artesanal, pero la mayoría protagonizan el escenario de la historia de los habitantes de la Península y sus Islas, cuando no existía la mecanización ni la industrialización para las tareas más elementales y duras en el entorno rural.