Aunque de Miguel Hernández (Orihuela, 1910-Alicante, 1942) a menudo se ha dicho que fue un poeta nacido en una familia humilde, y se ha destacado su condición de pastor, el escritor e investigador conquense Luis F. Leal defiende una tesis casi opuesta: la de que el autor de 'Perito en lunas' no fue en absoluto un niño pobre, ni falto de formación, ni poeta autodidacta. Y, aunque ejerció de pastor, en los aproximadamente cinco años que trabajó con las cabras su principal interés estaba en leer a autores como Virgilio o Fray Luis de León.