Esta es la historia de Fermín, de nueve años, y de su padre Roberto. Fermín es un niño a quien le gusta jugar a ser Blancanieves, aunque solo le dejan hacerlo a escondidas, que tiene grandes sueños pero que suelen convertirse en pesadillas, sobre todo desde el día en que su vecino Sebastián, feo y peludo, le mete la lengua en la boca en el ascensor. Roberto, su padre, se fue con un señor de Zaragoza hace años, y ahora vive con él allí, pero es infeliz. Roberto no se siente amado y no sabe qué hacer ahora mismo con su vida. Mi padre se fue con un señor de Zaragoza es una historia cruda narrada a modo de fábula infantil, con el estilo elusivo, metafórico, y a la vez directo como un puñetazo en el estómago, con el que nos tiene acostumbrado Rubén Guallar.