misterio, juego, complicidad, creatividad, interacción... cada doble página reproduce una serie de figuras de trazo naturalista en las que el artista juega con la analogía de las formas y las proporciones, y con tan solo dos colores crea un efecto visual de ingeniosas asociaciones: peces, pájaros, medios de transporte, herramientas... un universo de más de un centenar de ilustraciones que enriquecen el vocabulario y el conocimiento del mundo de los más pequeños a través de la observación y el pensamiento deductivo. pero, atención, tan importante como encontrar los rasgos que tienen en común, es detectar cuál es la figura engañosamente similar que se ha colado en la página: el intruso.
un libro cuya propuesta tanto estética como lúdica está al alcance de los no lectores, y permite un juego de complicidades que es difícil encontrar en los libros sin palabras dirigidos al público infantil. el libro ofrece más de sesenta páginas llenas de emoción y descubrimiento, y