Vivimos unos tiempos inciertos, marcados por la crisis ecosocial: "la crisis de las muchas crisis", ampliamente analizadas al principio de este libro. Pero solo podremos responder a los desafíos planteados siendo plenamente conscientes del mundo que está surgiendo, cuyas circunstancias, recogidas en la segunda parte de esta obra, nos colocan ante la gran bifurcación, una encrucijada en la combinar la lucha por llegar a fin de mes y por evitar el fin del mundo. La gravedad y dificultad de la situación que atravesamos reclaman buena información, mejor conocimiento y altas dosis de sabiduría para orientar nuestras elecciones. La última parte del libro plantea la urgencia de un cambio de paradigma que sea capaz de situar en el centro de la conversación pública la vida buena. Y en todo ello, qué pueden aportar las religiones en la búsqueda de respuestas a los problemas socioambientales.