La autora de esta biografía de Félix Máximo López (1742-1821) va más allá de la anécdota vital de este peculiar artista, para analizar su obra para tecla y su faceta como maestro y teórico, así como sus textos dramáticos, en principio para espectáculos privados pero que pasaron a los escenarios públicos. Todo ello enmarcado en el ambiente musical de la época y en los entornos concretos en los que trabajó: además de la Real Capilla, en diversos monasterios madrileños y en la red de teatros de la Villa y Corte. El libro se completa con el catálogo temático de la obra del compositor.