Es la víspera de navidad y a Clara y a su hermano Fritz les encanta la Navidad!
Cada año el Tío Drosselmeier les trae un regalo especial a cada uno. Este año, Clara recibe
un soldado de madera: un Cascanueces. A Fritz el Cascanueces le pareció tonto, pero Clara
estaba encantada con él. Y una noche ella se da cuenta de que su nuevo amigo puede hacer
mucho más que sólo romper nueces.
Érase una vez un valiente soldado que se enamoró de una verdadera princesa...