En todas las artes tradicionales japonesas, existe lo que se llama DO, EL CAMINO o LA VIA. La vía o el camino, es una forma de aprendizaje y también una forma de entender la vida, que permite a su practicante, tras un periodo de aprendizaje, más o menos largo y más o menos difícil, conocerse a sí mismo, a través de profundizar en su experiencia de la realidad cotidiana. Con el tiempo, el practicante de la vía, sea ésta cual sea, descubre que el éxito en su trabajo depende en gran parte del dominio que tenga de sí mismo.