ENTRE QUINCEAÑEROS ANDA EL JUEGO. Me dice hola / y sólo es una deferencia, / pero como estoy enamorado / yo veo gigantes / y pienso lo que no es. / Cegado por mi ilusión / la invito a dar una vuelta. / Ella acepta / y yo veo todo el trabajo hecho. / Seguimos un tiempo así, / cada nuevo día más juntos y melosos / mientras modelamos nuestro amor. / Ni me planteo otra posibilidad / de la que ven mis ojos / porque es algo evidente, / y cuando al fin me decido y procedo: / Oh, desilusión!
/ Se ha adelantado a mí / y ya ha entregado su corazón / a quien siempre le robó / los sentimientos. Iker Latatu