Viaje al ayer es una novela de fácil lectura, con una trama interesante que nos impele a llegar al final cuanto antes. Veamos como aperitivo unos párrafos de la página 59: El siguiente viaje en el tiempo tuvo lugar la última semana de febrero. [ ] Teresa se sentía entusiasmada con esta experiencia insólita. Se notaba diferente, libre y ante un mundo nuevo, misterioso y atrayente. No solo sentía curiosidad por ver cómo había sido la existencia y las costumbres en otro siglo, sino que la falta de ilusión que había en su vida y el vacío que sentía ante sus problemas matrimoniales se veían compensados con estas nuevas emociones fuertes, que le producían el efecto de una inyección vital de energía. El hecho de tener un secreto que solo compartía con Sofía, le producía descargas de adrenalina. [ ] Con ilusión, comenzó a hacer los preparativos. La puesta en escena era importante: así, volvió a alquilar en Cornejo un nuevo traje y, como la vez anterior, Sofía fue la encargada de llevarla al viejo palacete. Ambas amigas salieron de la casa de Teresa a las cuatro y cuarto de la tarde y atravesaron Madrid bajo un sol tuberculoso. Para su alivio, atravesó el arco sin problemas. Los nervios llegaron cuando se percató de que estaba de nuevo en 1876. Estoy segura de que los lectores pasarán momentos muy agradables paseando por el Madrid antiguo, y acompañando a Teresa y a Quintín en sus reflexiones sobre la vida, la culpa, el perdón y la reconciliación. Qué lo disfrutéis tanto como yo!