Imagen y palabra forman un conjunto armónico, conmovedor y piadoso en este vía crucis. La fuerza del dibujo -a todo color- hace que sea apto para todos los públicos y edades. Rehacer el camino de la cruz que recorrió Jesús hacia su muerte puede resultar uno de los ejercicios más propios de la Cuaresma. Sencillo vía crucis dialogado entre varios lectores y la asamblea de fieles.