El hombre de la Edad Media buscó respuesta a los misterios que le presentaba lo desconocido y para ello ideó unos mundos a través de los cuales podía dar forma a todo su imaginario, desde aquellos lugares insólitos de la tierra poblados por criaturas extrañas hasta los principales destinos escatológicos del más allá. Tampoco fue ajena a esta preocupación su fascinación por los astros y por la influencia que éstos podían tener en su vida cotidiana, aunque intentando adaptar las experiencias astrológicas a las doctrinas de la Iglesia. En este curso se abordarán algunos aspectos de toda esta casuística y se analizarán los recursos que utilizaron los artistas del momento para plasmar estas ideas en sus creaciones, desde la iluminación de códices a la escultura monumental. Como en ediciones anteriores, para facilitar la participación de un mayor número de alumnos se han programado dos convocatorias con idénticos contenidos (una en abril y otra en agosto), dirigidas ambas a un público muy amplio, desde investigadores y estudiantes universitarios hasta aficionados al arte románico en general.