El objetivo principal de este libro es tomar conciencia de todo aquello que, técnica o emocionalmente, influye en la mejora de la comunicación oral. Porque, no lo olvidemos, todo comunica; incluso cuando decidimos permanecer en silencio. Interpretar correctamente los mensajes del otro mediante una escucha activa, enriquecer nuestra capacidad expresiva sea cual sea el contexto que se nos presente o saber adaptarse a los diferentes públicos son cuestiones que en teoría parecen sencillas, pero se necesita práctica, preparación y constancia para eliminar costumbres nocivas en el terreno de la comunicación y adquirir nuevos hábitos que nos permitan disfrutar, sin tensiones ni miedos escénicos, de la participación en un coloquio, una ponencia, un compromiso social, o cualquier acontecimiento (la mayoría) en el que el lenguaje sea el protagonista.